Una rutina diaria de caminata puede beneficiar su mental y salud física, además de ayudar a perder peso. Sin embargo, si se encuentra haciendo lo mismo día tras día, puede hacer que cualquier rutina se vuelva obsoleta y, finalmente, hacer que se estabilice.
Ya sea que sea un principiante o un profesional de la caminata más experimentado, agregar nuevos elementos a su entrenamiento puede ayudarlo a evitar el agotamiento y las lesiones, al mismo tiempo que lleva su condición física a un nuevo nivel. Independientemente de tu estado físico actual, aquí hay cinco formas en que puedes hacerlo realidad.
Prueba un reto de 10 por 10
Uno de los mayores obstáculos a los que te enfrentarás como principiante es la consistencia. Para ayudar a desarrollar buenos hábitos y adoptar una rutina sólida, prueba este desafío de caminar, en el que camina 10,000 pasos al día durante 10 días consecutivos. No se preocupe por la velocidad o la forma todavía. En cambio, comprométase a aumentar su movimiento diario, ya sea agregando una caminata después de cada comida o caminando para hacer un mandado en lugar de tomar el automóvil.
Incluye ejercicios de peso corporal
Antes de llevar las cosas al siguiente nivel y comenzar a caminar más lejos o más rápido, querrás fortalecerte. Realizar ejercicios con el peso corporal es un excelente lugar para comenzar y puede ayudar a desarrollar los músculos para mantenerse libre de lesiones a medida que aumenta el kilometraje. Incluya algunas series de estocadas, stepups o flexiones inclinadas en un banco del parque durante cada caminata.
Enfoque en la postura
Caminar parece bastante simple, pero la postura adecuada marca una gran diferencia. Puede ayudar a que su paso sea más eficiente, aumentar la cadencia y quemar más calorías. Para empezar, trate de concentrarse en estos sencillos hábitos posturales durante al menos 5 minutos durante cada caminata:
- Cabeza: mantenga la cabeza erguida con los ojos a unos 10 a 15 pies por delante de donde camina.
- Columna vertebral: párese erguido y evite encorvarse o inclinarse hacia adelante.
- Brazos: mover más los brazos quema más calorías y hace que sea más fácil aumentar la velocidad. Evite los movimientos de lado a lado en todo el cuerpo y concéntrese en lograr un movimiento de adelante hacia atrás, manteniendo las manos relajadas.
- Núcleo: active su núcleo tirando del ombligo hacia la columna, lo que ayuda a evitar que se encorve.
Agrega kilometraje a tu caminata larga
Una vez que hayas desarrollado una rutina constante, una excelente manera de llevar su caminata al siguiente nivel es con una caminata larga semanal. Comience con una distancia que sepa que puede completar. Cada semana, aumente la distancia o el tiempo de esta caminata en 1 milla o entre 5 y 10 minutos para evitar lesiones por uso excesivo.
Apoyo a la tecnología
Tal vez su objetivo sea aumentar la resistencia, caminar 10 km o quemar grasa abdominal. Cualquiera que sea el caso, utilizar la tecnología en su beneficio facilita mucho el seguimiento de su progreso y sus objetivos de acondicionamiento físico. Esto podría significar permanecer en la correcta zona de frecuencia cardíaca, realizar un seguimiento de sus pasos y nutrición en MyFitnessPal o usar la aplicación MapMyRun para encontrar nuevas rutas para caminar.