Los pleyadianos
Luego de conocer a los lyrianos en el capítulo anterior, veamos quienes son los tan nombrados pleyadianos. Provienen de un cúmulo estelar abierto, compuesto por estrellas calientes de tipo espectral B, de edad corta, que forman parte de la constelación de Tauro. Las pléyades son conocidas también como las siete hermanas y es el cúmulo de estrellas mejor visible a simple vista en el cielo nocturno. Tienen un lugar privilegiado en la antigua mitología y en las tradiciones y culturas ancestrales de la tierra cuentan con un sin número de significados.
Según algunos expertos del mundo de los contactados, los pleyadianos son ancestros de los terrícolas y al parecer aportaron su ADN para la creación de los primero homínidos prehumanos que luego fueron manipulados genéticamente por los anunnakis. Su estructura biológica, es similar a la de los humanos, tanto que pueden pasar desapercibidos entre nosotros.
Su desarrollo tecnológico, es mucho más avanzado que el nuestro y mucho más que el de las razas de extraterrestres no benevolentes. De igual manera, tienen un alto desarrollo espiritual e incluso tienen sus propios guías y maestros espirituales. Para los pleyadianos la luz es considerada como información y la oscuridad como falta de esta.
¿Cómo es la sociedad de los pleyadianos?
Los ideales basados en el amor, son el motor de su sociedad, pero no siempre fue así. El alto nivel de tecnología y espiritualidad que hoy poseen, no es consecuencia de que sean mejores que nosotros. Se debe a que llevan más tiempo de existencia que la raza humana, pero en sus inicios empezaron igual como nosotros, desconectados totalmente de su naturaleza verdadera.
Tal cual, como nos sucede a la raza humana, en sus inicios también tuvieron muchas guerras y conflictos. No sabían o no habían descubierto aún quienes eran realmente y su raza se debatía entre la luz y las sombras. En esa etapa tan difícil de su evolución, también recibieron la visita y ayuda discreta de extraterrestres de luz, pero también la intromisión de razas oscuras.
Con el tiempo, pudieron elevar gradualmente su nivel de conciencia y conectarse con su origen espiritual, tal como lo haremos nosotros eventualmente. Actualmente sus sociedades se basan los altos ideales derivados del amor y el servicio a otros. Sus mundos lo dirigen los miembros más antiguos y sabios, aunque, su nivel de conciencia es tan alto, que cada individuo sabe que hacer y cual es su papel en la sociedad.
¿Para que nos visitan?
Siempre, las vibraciones de luz o alta conciencia, superan y dominan a las vibraciones de oscuridad o bajo estado de conciencia. Por esto, cualquier sociedad, en cualquier punto del universo, que se haya estancado en su desarrollo espiritual, de igual manera se estancara en su desarrollo científico. Por tal motivo, el desarrollo tecnológico de las civilizaciones extraterrestres estancadas en su desarrollo de conciencia espiritual, jamás podrá superar el desarrollo tecnológico de la civilizaciones de luz.
Cuando los pleyadianos alcanzaron su reconección con su origen espiritual, se lanzaron a sembrar su semilla en la galaxia. La tierra fue uno de esos lugares y nosotros, producto de esa semilla. Al parecer, esta es una de las maneras, en que la luz se expande por el universo. Y siendo los pleyadiano,s los sembradores de nuestra raza, son también parte de los custodios de luz, de la evolución humana. Esto por supuesto, sin interferir en nuestro libre albedrío.
Están aquí, cerca de nosotros y de cuando en vez, se contactan con ciertos individuos, para tratar de evitar que se estanque nuestro desarrollo espiritual y penosamente quedemos atrapados por un largo tiempo, en las legiones de razas al servicio de la oscuridad. Con el actual despertar de consciencia que se está dando en la tierra, tenemos muchas probabilidades de que tal estancamiento no suceda. Todo depende de nuestro libre albedrío.
Este es el propósito principal de la civilización de las pléyades, pero también mantener a raya a las razas oscuras que siempre están tratando de manipularnos, algunas veces con éxito. Esa asistencia benéfica, que ésta y otras civilizaciones desarrolladas espiritualmente prestan a la raza humana, depende mucho también de nuestro derecho colectivo y universal a la libre decisión. Por esto a veces, reptilianos, arcontes o grises, logran pequeños triunfos en sus proyectos oscuros para con los humanos.
No te pierdas el próximo capítulo, y conoce el resto de razas de luz que nos visitan.
