El comportamiento de los niños puede ser para muchos adultos difícil de entender. Sin embargo, en ocasiones dejamos de ser poco observadores y no notamos ciertas conductas, síntomas de una situación.
Debemos iniciar indicando que no todos los niños son iguales, dejemos de generalizar y comencemos a tratar con el respeto que cualquier persona merece.
Recuerden que son seres humanos en potencia, se encuentran descubriendo un mundo, comportamientos, emociones y situaciones que los desafiara.
Seamos guías en su camino e intentemos apoyar, ayudar a crecer y formar un carácter.
Recordemos que los niños son como esponjas todo ejemplo que vean y sigan en la casa pensaran que es el correcto e idóneo en su ambiente.
Intentemos tratarlos con respeto y mostrarles nuestros buenos modales, un error que cometemos adultos es que le damos a pensar a los niños que solo ellos deben ser educados.
Abramos nuestra mente, superemos esos traumas de la niñez y seamos personas que puedan aportar al crecimiento de los más pequeños.
Si vives con un niño o niña eres responsable del futuro de esa persona, participa en su crecimiento con simples acciones, respeto, modales y educación.
Analicemos las acciones y comportamiento de los niños
A diferencia de los adultos, los niños son muy puros a la hora de expresar sus emociones en sus primeros años de vida; no suprimamos esas reacciones y ayudemos a expresarlas correctamente.
Dejarlos hacer un berrinche y solo reaccionar cuando se portan mal, se interpreta que solo presta atención cuando está haciendo una mala acción.
Entre los comportamientos que debemos prestar atención, te podemos mencionar:
- Aislamiento del menor con sus amigos y familiares, no quiere contacto físico.
- Cambios de humor constantes, frustración, enojo, hostilidad, violencia, hiperactividad entre otros no son comportamientos normales con frecuencia que puedas ver.
- Daño así mismo, se infringe heridas, sin autoestima, no podemos decir que es solo una etapa, ningún niño haría esto por rebeldía.
- Comportamiento rebelde no quieren escuchar y no respetan a las personas
- Dolencias físicas, prestemos atención a el comportamiento físico de los niños, recuerden ellos expresaran siempre la verdad.
- Mostrar agresividad hacia sus amigos, padres o familia, no dejemos pasar por alto este comportamiento ni las faltas de respeto.
- Contacto sexual inapropiado con otros niños, debemos hablar con calma y saber la raíz del problema, siempre creamos en nuestros niños y analicemos las situaciones.
- Búsqueda desesperada de afecto, que un niño carezca de amor puede ser síntoma de un grave problema, observemos nuestro panorama completo.
- Perdida del habla o comunicarse, esto lo puede provocar un gran trauma, no dejemos pasar situaciones así por alto.
Estos son algunos de los comportamientos anormales que se pueden presentar en algún niño o niña que pueda estar pasando por algún problema, ya sea desde bullying, maltrato, agresión o amenaza.
Busquemos siempre estar cerca de ellos y utilicemos la comunicación como aliada en nuestras relaciones.