En algún momento, la mayoría de las personas experimentan la sensación de que hay algo más grande que el mundo concreto que habitamos. Ya sea que este sentimiento esté inspirado en un misterio de la ciencia, la impresionante vista desde una majestuosa cima de la montaña o la energía experimentada al conectarse con otros, estos momentos pueden ser increíbles Son estos sentimientos, momentos y experiencias los que forman la base de nuestra noción de espiritualidad.
Uno de los aspectos más bellos de la espiritualidad es que todos pueden experimentarlo de manera diferente. Para algunas personas, la espiritualidad se trata de una devoción a la fe religiosa. Otros buscan una conexión más personal con su lado espiritual al participar en actividades como el yoga, la meditación, pasar tiempo en la naturaleza o la expresión creativa.
No hay una forma correcta o incorrecta de acercarse a la espiritualidad. Lo importante es reconocer que el viaje es el premio. Si eres alguien que ha dedicado su vida a promover su desarrollo espiritual o está comenzando a descubrir su espiritualidad, hay lecciones importantes que se pueden aprender del camino. Disfruta de estas reflexiones a continuación.
Haz cambios lentamente
Las personas que tienen grandes intenciones de cambiar sus vidas están súper entusiastas por un tiempo y luego se detienen. El problema es que el mero entusiasmo solo puede ayudarte a comenzar. Si deseas un cambio a largo plazo en tu vida, debes comenzar lentamente, sabiendo que el arranque inicial de energía no durará. En cambio, apunta a cambiar los hábitos. Una vez que se forma un nuevo hábito, puedes llevar tu práctica cuando el entusiasmo inicial se haya ido. El hábito estabilizará su práctica, permitiendo que la inspiración permanezca dentro de ella.
El problema de seguir solo tu entusiasmo es que comenzará muchas cosas solo para renunciar a ellas más tarde. Es mejor hacer una cosa bien que comenzar y detener diez.
Meditar
La meditación calma tu mente, calma tus sentidos y abre tu corazón. A través de la ciencia espiritual de la meditación, puedes experimentar la paz del contacto personal directo con Dios.
La meditación no es un vaciamiento de la mente. Es la forma más alta de concentración en la cual la mente te enfocas. No te desanimes si tu atención se desvía y los pensamientos mundanos se entrometen. Simplemente comienza de nuevo como si acabaras de comenzar. Continúa tu práctica fielmente, sin expectativas, y aprecia las bendiciones que se te presenten.
Siéntate brevemente en silencio y en soledad después de completar su práctica para construir un puente de serenidad entre tu meditación y el mundo impaciente que espera su regreso. Con el tiempo, con suficiente paciencia y práctica, podrás acceder a una profunda quietud interior donde sea que te encuentre, sin importar lo que esté sucediendo a su alrededor.
Estar dispuesto a comprometerse con algo.
Uno de los desafíos que he visto para muchas personas que desean profundizar sus vidas espirituales es la tendencia a querer probarlo todo y ser un estudiante de todo. Es fácil revolotear, entusiasmarse con Kirtan un día, rituales paganos al día siguiente y oración devocional sufí al día siguiente.
Hay una gran variedad asombrosa de expresión espiritual en el mundo, y es comprensible que quieras probarlo todo. Sin embargo, a menos que encuentres uno o quizás dos caminos para comprometerse realmente durante un período de tiempo más largo, es muy difícil profundizar.
Dado que las enseñanzas espirituales tienden a ser sutiles, complejas y estratificadas, generalmente lleva años de estudio y práctica digerirlas a un nivel en el que afecten completamente su vida. Esto no significa que no pueda ser influenciado por una diversidad de tradiciones espirituales y / o religiosas, ni sentirse cómodo con ellas. De hecho, a través de esa devoción al Zen y al yoga, hay gente que se ha vuelto más capaz de escuchar las enseñanzas de otras formas.
Busca un maestro o mentor.
En pocas palabras, tener un mentor espiritual con más experiencia puede ser de gran ayuda. Esta persona puede ofrecer información sobre la historia, las enseñanzas y las prácticas. Pueden ofrecerte soporte específico cuando tengas dificultades. Pueden ser un espejo para ti, para que puedas ver mejor quién eres en el mundo y cómo te gustaría ser en el futuro. Los maestros y mentores vienen en todas las formas y formas.
Las relaciones con los maestros y mentores pueden ser por un período específico de tiempo, o pueden terminar siendo de por vida. No existe una fórmula real, y cada conexión está definida de manera única, pero en general, quieres un mentor / maestro comprometido con la apertura, la compasión y el poder compartido.
Pingback: Kung Fu Panda: la película animada con enseñanzas taoístas que inspira