Si viéramos en los problemas y las equivocaciones oportunidades de aprendizaje podríamos fluir mejor en la vida
Desde pequeñas se nos enseña que equivocarnos esta mal, que es algo que debemos evitar a toda costa, incluso sabiendo que todos somos imperfectos, exigimos perfección en los demás y cuando alguien se equivoca juzgamos y condenamos.
También pretendemos que nuestra vida sea color de rosa y cuando llegan los problemas los vemos como algo que no debiera pasarnos o algo que no merecemos.
Detrás de todo problema y equivocación hay oportunidades de aprendizaje
Todas aquellas personas que han llegado lejos y han logrado grandes cosas en su vida, tienen un historial largo de equivocaciones y problemas enfrentados.
Detrás de todo problema o toda equivocación hay un aprendizaje, después de superar una situación difícil en nuestras vidas, sin duda alguna hemos salido más fortalecidas y descubierto capacidades de nosotras mismas.
Debemos cambiar las creencias que tenemos sobre nuestra imperfección. Este es uno de los conceptos más alentadores y uno de los más difíciles de lograr en nuestra sociedad.
Cerremos los ojos y recordemos los mensajes que recibíamos de nuestros padres sobre los errores cuando éramos niñas ¿Cuáles eran?, ¿Acaso nos decían que eran oportunidades de aprendizaje? o por el contrario no castigaban por eso y nos hacían sentir tontas, inadecuadas, etc.?
Desde nuestra infancia se nos ha sembrado ese miedo a equivocarnos y por eso a veces no tomamos acción para salir de la zona de confort, porque no vemos las oportunidades de aprendizaje.
¿Cómo recuperarse de los errores?
Primero es necesario cambiar la creencia negativa sobre los errores, así podremos adquirir lo que Rudolf Dreikurs llamaba ‘El valor del ser imperfecto’.
Utilizar las 3 ‘R’ de la Recuperación es una gran manera de ver las oportunidades de aprendizaje en los errores.
1. Reconocer: “Cometí un error”, esto aún nos cuesta mucho, pero es el primer paso para cambiar el paradigma mental que tenemos sobre las equivocaciones.
Es más sencillo hacernos responsables de los errores cuando los vemos como oportunidades de aprendizaje, porque si los percibimos como algo malo nos sentiremos mal.Reconciliar: “Lo siento”, cuando estás dispuesto a pedir disculpas a quienes ofendiste no solo te sientes mejor contigo misma, sino que te da grandeza como ser humano y creas un ambiente positivo a tu alrededor
2. Resolver: “Qué puedo hacer para solucionar mi error”, dejar la culpa a un lado y mirar hacia adelante, tomando la oportunidad de aprendizaje y resolviendo
Reconocer y reconciliar crean una atmósfera positiva para poder resolver.
Como seres humanos es común que nos sintamos emocionalmente atrapados y perdamos nuestro sentido común, reaccionando irreflexivamente. Pero siempre podemos regresar a nuestro centro y ver en estas equivocaciones oportunidades de aprendizaje que nos ayudarán a ser una persona más consciente.
