Luz en la oscuridad
A lo largo de estos largos meses de pandemia, hemos observado las diferentes formas de reaccionar que tienen los individuos. Para muchos ha significado una desgracia y calamidad tener que estar encerrados y teniendo cuidados «extremos» al salir de la casa. Las quejas son el plato fuerte del día en todas las redes sociales e inclusive, en cualquier conversación entre amigos o compañeros de trabajo.
Muchas veces podemos estar tentados en encadenarnos en ciertas «catarsis» que no llevan a nada, sólo a que nuestro «ego» se desahogue y nos sintamos por lo menos escuchados y entendidos. A veces este tipo de conversación puede llevarnos a creer que nos alivia el saber que no somos los únicos en pasar por ciertas dificultades. Pero te aseguro que al final, podemos convertirnos en seres que no aportamos soluciones, en seres que nos dejamos llevar por ciertas pasiones y que no aportamos a la solución.
Hoy te quiero hablar que podemos ser Luz en la oscuridad. Podemos decidir convertirnos en agentes de la esperanza, de la reconciliación y del sumar en todos los aspectos de nuestra vida. Puede ser que en estos momentos tú mismo te encuentres desanimado, pero créeme quizá una palabra tuya basta para que seas un aliciente y una luz en el camino de otros.
¿ Qué podemos hacer por otros?
Tanto por la situación de pandemia como por la económica, puede ser que muchos familiares o amigos se encuentran desanimados y sin esperanza. Es importante que los apoyes desde tu propia paz. Muchas veces nos hacemos los fuertes para apoyar a otros, pero déjame decirte que no es necesario. Basta sólo que le digas a un amigo que viene con la queja o la desesperación, que tú entiendes por lo que está pasando, porque lo has vivido en carne propia, pero que también sabes que paso a paso se pueden encontrar razones para seguir adelante.
Recuérdale a tus amigos y familiares y todo aquel que pide tu ayuda o escucha, que las crisis las podemos ver como oportunidades para reinventarnos, para sacar de lo más interno de nosotros nuevas cosas para emprender o para retomar algunos sueños. Puedes conversar con ellos acerca que en la vida todo, absolutamente todo está en constante cambio y que dependerá de nosotros como aceptemos y nos adaptemos a dichos cambios.
Para el manejo de la cotidianidad, la cultura popular tiene varios dichos o refranes que contienen mucha sabiduría. Entre ellos en mi País, y en muchos otros, se conoce el dicho; si del cielo te caen limones aprende a hacer limonada. Con esto no quiero decir que seas conformista, o que todo lo que esté pasando a tu alrededor este bien. Lo que quiero decirte que lo único que depende de ti, es la actitud que tomas ante los cambios.
Sobreponiéndote al duelo
Muchos cambios, significan que algo termina, cambia o no está. Es natural que pases por las diferentes etapas del duelo. A muchos le ha significado entender, que el trabajo en el cuál llevan más de 20 años de su vida, ya no está. Sobreponerse a ello no es sencillo, ya que para muchos significó muchos años de entrega, sacrificios y mucho amor por ese trabajo. Dejarlo atrás puede doler mucho y llevarnos a sentir que somos víctimas de una injusticia.
La clave puedo decirte que está en la aceptación y el agradecimiento. No te digo que aceptes la forma en que terminó tu relación laboral. quizá porque no fue la mejor. Lo que te invito es a aceptar que está sucediendo esa situación y que sólo depende de ti como lo asimilarás. Agradece el tiempo que estuviste allí, las alegrías, los aprendizajes y hasta los momentos tristes, porque todo ello significó la totalidad de tu experiencia en ese lapso de tu vida.
Agradece lo que gracias, por ejemplo, a ese empleo, obtuviste. No sólo agradece la parte material, agradece a cada persona que conociste. Luego agradece la oportunidad que la vida te está dando para abrir otras puertas, nadie dice que será fácil, pero agradece la oportunidad que tienes de hacerlo. Todo esto que te digo con un ejemplo laboral, se aplica a todo tipo de cambios y circunstancias.
La aceptación es parte del duelo, y es el piso para que empieces a reponerte y a visualizar nuevas oportunidades. Te dejo algunas frases que puedes compartir en tus redes sociales, de seguro a alguien le puede servir de aliento y justo en ese momento te conviertas en una pequeña luz en su oscuridad.
- Solo esta vencido, aquel que cree serlo.
- Si vives en un mundo negativo, es tu decisión hacerlo positivo…
- Si ríes el mundo reirá contigo, si lloras, solo tú te mojaras la cara.
- ¡El que se arriesga no pierde nada y el que NO se arriesga no gana!
- La vida es un largo camino en el que somos maestro y alumno. Unas veces te toca enseñar, todos los días te toca aprender.
- Reza a Dios, pero sigue remando hacia la orilla. (Proverbio anónimo)
Te comparto una linda música del canal Relax Hall Español para esos momentos en que necesites levantar tu ánimo y ayudar a otros.
Ahora, decide convertirte en Luz en la oscuridad. Te envío un gran abrazo.