Finalizamos el 2020 un año que nunca olvidaremos
Un año que marca nuestro el inicio de este blog, en Marzo, al estar confinados, escuchar datos sin cesar de la evolución del virus y disponer de horas y horas para pensar y para crear.
Internet demostró hace tiempo que las fronteras ya no existen, el virus desgraciadamente también lo demostró, cebándose más en unos países que en otros.
Un portatil, una conexi´ón a internet, posts en redes sociales, autores sensibilizados con la causa y zas, lo volvimos ha hacer de nuevo, lo creamos y esta vez casi sin querer, sum.
Cogito ergo sum
René Descartes
Aunque todo el mundo lo tradujo como ‘Pienso luego existo’ nosotros nos quedamos con ‘Pienso luego soy’ y de ahí, salió el nombre del blog. Pienso luego existo, pienso luego yo soy. Existo y soy cuerpo, soy mente, soy relaciones humanas, relaciones sociales con mi familia, mi pareja, mi entorno y naturalmente conmigo mismo, siempre desde el respeto. Y soy mi espíritu, los cuatro pilares principales de nuestra línea editorial, los pilares que nos construyen como ser, desde la propositividad, la espiritualidad y la consciencia, los valores de comunidad y el respeto por nuestro hábitat, nuestro planeta, nuestra naturaleza, desde la primera acción, hasta la acción final.
Gracias eternas por leernos, por seguirnos y por compartir conocimientos y consciencia.
