Hace más de seis meses que comenzamos a vivir algo que el año pasado hubiese sido inimaginable. Nuestra vida sufrio un stop y ahora es tiempo de movilizarse de nuevo. En varias partes del mundo ya se habla del desconfinamiento y la nueva normalidad. Así como la pandemia nos tomó de sorpresa sin un manual, así debemos regresar al mundo con algunos hábitos que hemos internalizado en estos meses.
A muchos nos toco el confinamiento en familia, con padres, esposos hijos y hasta hermanos, todos juntos en unos pocos metros. A otros en cambio les toco vivirlo sólos en sus casas. Muchos a pesar de la pandemia tuvieron que protegerse aún más para atender enfermos en los hospitales y en los sectores económicos que nunca pararon.
El desconfinamiento ahora de nuevo nos pide adaptarnos a situaciones que muchas veces no significaban un problema para nosotros. Cuando ibamos a la oficina a reuniones de trabajo quizá solo nos preocupabamos por llegar a la hora. Si éramos los anfitriones tener listo un buen café para compartir. Ahora debemos recordarle a nuestros compañeros las normas de bioseguridad. Establecer cuál será el mejor espacio para hacer la reunión. Así queramos abrazarnos por el tiempo que hemos estado distantes, saber ver el brillo en los ojos de otro y saber cuánto nos extrañaba.
Algunas cosas aprendidas
El estar fuera de la rutina por varios meses, nos permitió dedicarnos a hacer cosas que antes no podíamos por falta de tiempo. Quizá tuviste la oportunidad de leer aquel libro que habias dejado a la mitad. Puede ser que te convirtieras en una buena cocinera, porque entretenías a tus niños haciendo algunos postres. También puede ser que al principio de esta historia estando sóla en tu cuarto y con mucho miedo empezaste a investigar sobre el mundo espiritual.
Te sorprendería analizar el aumento que no sólo tuvieron las compras en línea, tambien debes saber que la busqueda de técnicas para manejar las emociones se incremento exponencialmente. Muchas fueron las personas que tomaron cursos en linea sobre yoga y meditación. Otros se formaron en área como técnicas de liberación emocional y mindfulness para poder enfrentar todo lo que ha significado la pandemia.
Además de limpiar y arreglar profundamente nuestras habitaciones, sacamos las cosas que ya no usamos y donamos aquellas en buen estado. Este tipo de limpieza significó una purificación en nuestro interior. Empezamos a darnos cuenta que los rencores no tenían sentido y que la vida nos podía cambiar en cualquier momento. Al sentirnos frágiles pudimos entender cómo se sentían otros y a darnos fuerzas entre amigos, conocidos y familiares a través de las redes sociales.
Conserva tu espiritualidad en el desconfinamiento
Aunque nuestras vidas no serán las mismas luego de esta pandemia, puede ser cuestión de días para que olvides hábitos y herramientas aprendidas en el confinamiento. Puede ser que ahora trabajes desde casa y te sientas tan agobiado porque no consigues administrar tu tiempo y pienses que no te queda tiempo para meditar.
El no tener tiempo para ti, para alimentar tu espiritualidad pueda llevarte a sentirte como en el inicio. Establece momentos para seguir aplicando mindfulness, para realizar meditación o simplemente para seguir dandole forma a ese proyecto familiar, profesional o personal que quieres emprender. Llama a tus amigos y familiares y comenta cómo les fue en el día y recuérdales lo mucho que los quieres.
No caigas en la trampa de desaprender lo que tanto te ayudo en el desconfinamiento. Aplica lo aprendido en las nuevas situaciones que se te presenten en la interacción con otras personas y otro ambiente en lo llamado la nueva normalidad. La espiritualidad no esta representada por algun grupo religioso, al cual debas pertenecer. La espiritualidad la puedes sentir desde el amor, ese amor que te hace valorar y respetar cada forma de vida.
La pandemia ha sido la oportunidad de valorar los detalles y momentos que dábamos por hecho. Cuántas veces no extrañamos sólo poder caminar al aire libre, tomarnos un café con algún amigo o visitar a un familiar. Ahora, es momento quizá de poder hacerlo con agradecimiento por la oportunidad, porque estamos vivos para seguir aprendiendo, porque podemos dar aliento y apoyo a quien lo necesite.
Te dejo una meditación guiada del canal Mindful Science para que la realices antes de irte a la cama o luego de tu almuerzo en la oficina,.
Desde acá te envío un abrazo de luz.
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