Como te comenté en el articulo anterior, tenemos contacto con el mundo una vez que nacemos. Este contacto se realiza a través de lo que llamamos los cinco componentes del ser humano o los cinco agregados. Estos son los que te permiten, a través de los estímulos que recibes de los sentidos, su percepción, las ideas que te puedas crear y la consciencia, interactuar con el mundo.
Desde la impresión que tienes al leer este articulo, hasta todas aquellas experiencias simultáneas que te están sucediendo mientras visualizas estas lineas. A medida que avanzas en la lectura, estarás experimentando el hecho de sentirte consciente, de interpretar lo que lees y de hacerte algunos juicios según la información que manejas.
Materia, forma, Rupa
Son aquellos patrones energéticos que llegan a los sentidos y luego son procesados por los demás agregados, es si es lo que podemos:
- Ver
- Oler
- Gustar
- Sentir
- Oir y los pensamientos.
Rupa, significa, que lo que puede ser olido, comienza como una forma, es energía captada por un sentido, en este caso el olfato. Por ejemplo el olor de una rosa, comienza con una forma energética que luego captamos a través de nuestro olfato y siendo procesada por los demás agregados, lo aceptamos como el olor de una rosa.
De la misma manera, sucede con todas las otras formas. Cuando escuchamos un carro acercarse y hasta cuándo somos conscientes de un pensamiento, inicio con una forma, una rupa. Los seis tipos de formas que te liste anteriormente, constituyen la base externa de los sentidos. La base externa es lo que viene de afuera.
La base interna son los sentidos propios con lo que son captados estas formas. Te puede parecer extraño hablar de algo que viene de fuera, cuando te percatas que los pensamientos son tratados también como que vinieran «de fuera». Te podrías cuestionar; pero si mis pensamientos vienen de dentro, ¿Cómo puede decirse que vienen de fuera?. La respuesta está, en que para el cerebro, todo son señales que vienen «de fuera» para ser procesadas.
Sensación, Vedana, Valencia, Gama ( Placer-dolor)
Todo lo que contactamos a través de los sentidos, produce una sensación sentida físicamente. Esta sensación puede percibirse como agradable, neutra o desagradable en una banda de matices. Muchas de las sensaciones que percibes en el día son de baja intensidad, por lo que su tonalidad para ti es neutral. Otras sensaciones si las puedes definir con claridad si te son agradables o totalmente desagradables. Imagina por un momento un platillo que te encante o algo que de verdad prefieras no comer ni oler.
La tonalidad de las sensaciones no se mantiene constante. Estas tonalidades dependerán del sentido involucrado, del estado de ánimos en el que nos encontremos, de las situaciones ambientales, y de las memorias que estén asociadas a dichos estímulos. Un ejemplo de ello, es la forma en como algunos personas con autismo perciben los olores, para muchos de ellos algunos olores son insoportables. Una sensación agradable nos puede transportar a otros tiempos en el pensamiento, ¿ Recuerdas alguna canción de tu niñez?.
La tonalidad de las sensaciones, no se las puedes atribuir al estímulo. La tonalidad está relacionada a la reacción del a mente ante tal estimulo. Eso te puede llevar a reflexionar que todo lo que observamos en nuestro mundo tiene una tonalidad distinta para ti. Puedes decir que el chocolate es delicioso, mientras otro le desagrada y aunque a muchos les gusta, su tonalidad es distinta, es de desagrado.
La tonalidad de las sensaciones pueden ser entrenables. Puede ser que un sabor que no te gustaba, puedas con el tiempo considerar agradable. Cuando estaba niña, recuerdo que no comía huevos porque no me gustaba, ni su sabor ni olor. Ahora me parece que es de sabor agradable, aunque sigo pensando que si me puedo comer sólo las claras para mi sería mucho mejor. En cambio a mi hija de ocho años le gustan los huevos y no le gusta ningún tipo de salsa, ni de tomate, mostaza o mayonesa.
Percepción, Sañña
Es la función mental que nos permite distinguir como algo específico, las formas que captamos a través de nuestros sentidos. Es la creación básica de los conceptos. Esta función nos permite que todo lo que llega a través de nuestros sentidos tenga un significado para nosotros. Es decir, aquel ruido que puedes escuchar, tu mente lo procesa y puedes decir que se acerca un auto o una motocicleta, sólo con percibir el ruido.
La percepción es aprendida, cada cosa, animal o situación, la hemos conceptualizado con el transcurrir de los años . A todo le hemos dado un significado. Cuándo no sabías leer, quizá pudiste ver tu nombre escrito en un pendón en tu cuarto y no distinguir que estaba escrito tu nombre. Cosas tan cotidiana como saber quienes son nuestros padres, nos costó aprender desde pequeños, cuando logramos asociar un rostro con el de nuestra madre.
El proceso de percepción se inicia de forma preverbal, es decir, cuándo escuchas un sonido, no es necesario penar con lenguaje verbal. Escuchas el sonido de la lluvia, y puedes saber que está lloviendo. Luego podrás decir; Me encanta la lluvia, recuerdo cuando estaba pequeña en la hacienda de mis abuelos y la lluvia se escuchaba cuando venía a lo lejos……… Este paso de volverse de una percepción preverbal a algo verdaderamente complejo como la narrativa anterior, puede darse de una forma increíblemente veloz.
Seguramente te ha pasado que cuando escuchas un ruido fuerte en tu casa , te asustas y gritas preguntando: ¿ Todos bien?, ¿ Qué se ha caído? ¿ Fue aquí?. Sólo cuando te entrenas en la consciencia plena, es que puedes distinguir el estímulo y separarlo de todos aquellos juicios y añadiduras que puedes agregarle. Te quiero dejar una imagen para que la puedas observar y puedas decir a qué pertenece.
No te preocupes, te prometo que en la próxima entrega te diré de qué se trata.
Un abrazo de luz.
